Lección 5: El alcohol es una droga

Una de las muchas drogas, frecuentemente la de mayor importancia por la facilidad con que entra en la vida de los adolescentes y los adultos, es el alcohol. A pesar de que el alcohol es una droga legal y socialmente aceptada, los efectos de su consumo y abuso pueden llevar al desarrollo de una adicción, y de gran cantidad de problemas en el cuerpo y en al personalidad de los seres humanos. Lo más grave de ello es que por ser aceptado en el medio social, generalmente no se miden las consecuencias de su consumo y para cuando la gente adquiere conciencia de que tiene un problema relacionado con el alcohol, suele ser demasiado tarde, pues para entonces ha desarrollado una enfermedad: alcoholismo. 

El consumo de alcohol produce diversos cambios en el comportamiento y, aun en pequeñas dosis, afecta de manera significativa el juicio y la coordinación necesarios para realizar diversas actividades, como conducir un automóvil. En dosis pequeñas y moderadas, el alcohol puede aumentar la incidencia de diversos actos agresivos, como el maltrato físico entre personas que, de no haber consumido ninguna bebida alcohólica, no se comportaría de manera violenta. 

El consumo continuado de alcohol termina por causar dependencia, en cuyo caso la repentina interrupción de la ingestión produce síntomas como ansiedad pronunciada, temblores, alucinaciones y hasta convulsiones. Los efectos a largo plazo del consumo en grandes cantidades de alcohol, sobre todo conjuntamente con una nutrición deficiente, suelen ocasionar daños permanentes en órganos vitales, como el cerebro y el hígado (sí las células del hígado pudieran hablar, describirían las bebidas alcohólicas como exigentes y egocéntricas, totalmente contrarias al estilo con que el hígado maneja sus actividades). 

Mensaje Protector: desafortunadamente existen a nuestro alrededor sustancias que nos dan a pesar de que la sociedad las acepta y suele consumirlas. Aprender a decirle no al consumo de esas sustancias es nuestra responsabilidad y parte de nuestro crecimiento. 

Lección 4: Los juegos electrónicos

Gracias al desarrollo de la tecnología y la urbanización, cada día tenemos más objetos que nos facilitan las labores y los procesos de conocimiento. Por ejemplo, ahora algunas familias casa no usan el molcajete, pues existe la licuadora; caminamos menos, pues existen todo tipo de vehículos de motor. Porque contamos con tecnología cada día más avanzada, hoy podemos comunicarnos con el resto del mundo con mucha facilidad, tanto por medio del sonido como a través de la imagen o del espacio cibernético, lo cual es bellísimo en tanto que nos acercamos a otros seres humanos, paisajes costumbres y formas de vida a lo largo del planeta. 

De la misma manera, la tecnología ofrece la posibilidad de que cada día más personas tengan computadoras en sus hogares y escuelas, en su trabajo, etc. Esto facilita tanto el proceso de aprendizaje, como el acceso al conocimiento más novedoso y al almacenamiento de información.  

El mejor ejemplo de lo anterior son los juegos electrónicos, los cuales absorben de tal manera la atención que producen lo que se llama obsesión. La desesperación por vencer a una máquina programada para no ser derrotada y la necesidad creada de superar la puntuación de otro jugador despierta el espíritu de competencia, pero de forma exagerada y obsesiva, lo cual en ocasiones nos hace perder la perspectiva real de la amistad, el cariño, la ayuda mutua, la solidaridad y el respeto hacia nuestros compañeros. 

Por tanto, estar conscientes de la forma como ocupamos nuestro tiempo, nos ayuda a distribuir mejor nuestras actividades y a darnos cuenta de cuando estamos abusando de algo. 

Mensaje Protector: ¿Has escuchado hablar acerca de la hipnosis involuntaria? Es una forma de adicción, lo cual sucede cuando pasamos horas enteras frente a los juegos electrónicos o a los de las computadoras.